17 de noviembre de 2011



Queridas princesas: No van a aparecer en vuestra casa a las 3 de la mañana con flores. No van a gritar lo mucho que os quieren desde el otro lado del pasillo. Seguramente no van a escribiros así porque sí para deciros lo preciosas que sois. No van a cantar o bailar con vosotras bajo la lluvia. Sí, la mayoría engañan y mienten. Pero también nosotras lo hacemos. Dejad esas altas expectativas y asumid que no son perfectos, ni vosotras tampoco lo sois.

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